sábado, 31 de mayo de 2008
DAWN OF THE DEAD (1978)
Dir. George A. Romero Guión. Darío Argento Prod. Richard P. Rubinstein FX. Tim Savini Fotografía. Michael Gormick Musica. Darío Argento
Desde que vi esta obra maestra del cine de horror, no puedo evitar ir de compras a un centro comercial sin imaginar como sería si me encontrase atrincherado, evitando de todas las formas humanas, que consigan entrar las hordas de zombies hambrientos de carne humana que se encuentran en el exterior deseando celabrar un banquete a mi costa.
GAR ( George A. Romero ) imaginó algo semejante cuando, visitando un centro comercial en Pittsburg, observó la actitud de la gente que compraba compulsivamente.
En ese momento, Romero ya tenía en mente realizar la secuela de “ la Noche de los Muertos Vivientes”, y de esta experiencia obtivo la idea con la que partir.
En un principio contaba con u presupuesto bastante limitado, aunque, con la posterior incorporación del rey del Giallo Darío Argento, este augmentó. Pudiendo de esta forma, dar aún más rienda suelta a su imaginación.
El guión y la banda sonora quedó a cargo de Argento, y para los FX, GAR no dudó en contar con el rey de las vísceras Tom Savini. Con quién había colaborado anteriormente en Martin (1978).
El escenario: Un extenso centro comercial con todo tipo de recursos. Fuera, centenares de zombies descontrolados.
Los personajes: Dos miembros del S.W.A.T; uno negro y uno blanco; un piloto de helicópteros y su mujer, periodista de TV.
A partir de esta premisa, Mr. Romero se encarga de crear otra obra maestra del horror, combinando convenientemente los ingredientes básicos de las películas del género, con una fuerte sátira a la sociedad de consumo.
GAR utiliza a los zombies como excusa para que sus personajes evolucionen ante situaciones extremas…
La cuestión es que la película fue un exitazo tanto en América como en Europa. El título varió; En Europa adoptó varios títulos tales como “Zombie: Dawn of the Dead” o “ Zombis”. La duración también variaba: en USA duraba 120’ mientras que en Europa contaba con 117’.
En España se estrenó en Enero de 1979, titulada “Zombi”, siendo también un enorme éxito en taquilla, llegando a más de 500.000 de espectadores.
Sin duda se trata de una película imprescindible en cualquier ZOMBIDEOTECA sres.
Por el Doctor Chainsaw
28 DIAS DESPUES
Cillian Murphy, Naomie Harris, Noah Huntley, dirigida por Danny Boyle, UK 2002
Esa palabra tan eufónica, llena de calidez y que resuena como música celestial en los oídos frikis que es ZOMBI, por algún extraño motivo provoca repulsa y nauseas en los oídos “normales” y gótico-sinistro-fashion-romanticoides. Por ese motivo, el director Danny Boyle debió ingeniárselas a la hora de realizar un film de zombis… ¡sin zombis!, de hecho en 28 días no aparecen muertos vivientes de ninguna clase, pese a tener la misma estructura que ese tipo de películas. Los supuestos zombis resultan ser personas infectadas por un virus ultra-chungo en plan Estallido (¡Puag!). De todas formas, valoro ampliamente este intento del guionista Alex Garland por “naturalizar” una historia de zombis, despojándola de toda caspa y fantasía excesiva y dándole a todo una explicación lógica y racional, lo que la convierte en una historia única en su campo y quizá la más elegante desde Night of the Living Dead. Los homenajes a sus predecesoras no faltan, como el saqueo de un centro comercial, los militares desquiciados, el zombi encadenado para estudiarlo, Frank, el padre que sobreprotege a Hannah, su hija, Selena, la heroína dura y sufridora de raza negra… y no sólo homenajes a Romero, la historia comienza a lo Peter Jackson con el mordisco de un mono rarísimo, y se desarrolla con un ritmo 100% Dario Argento. La película en sí, destaca por los cuidadísimos pequeños detalles que siempre se escapan, como la falta de electricidad, y los recursos para conseguir agua, comida… ¡y diversión masculina!, la realista imagen de un Londres hueco, y la novedad de unos zombis más violentos, rápidos y mortales que nunca. ¿La lástima de todo el asunto? De los 10 finales que rodaron, eligieron el más tonto.
Esa palabra tan eufónica, llena de calidez y que resuena como música celestial en los oídos frikis que es ZOMBI, por algún extraño motivo provoca repulsa y nauseas en los oídos “normales” y gótico-sinistro-fashion-romanticoides. Por ese motivo, el director Danny Boyle debió ingeniárselas a la hora de realizar un film de zombis… ¡sin zombis!, de hecho en 28 días no aparecen muertos vivientes de ninguna clase, pese a tener la misma estructura que ese tipo de películas. Los supuestos zombis resultan ser personas infectadas por un virus ultra-chungo en plan Estallido (¡Puag!). De todas formas, valoro ampliamente este intento del guionista Alex Garland por “naturalizar” una historia de zombis, despojándola de toda caspa y fantasía excesiva y dándole a todo una explicación lógica y racional, lo que la convierte en una historia única en su campo y quizá la más elegante desde Night of the Living Dead. Los homenajes a sus predecesoras no faltan, como el saqueo de un centro comercial, los militares desquiciados, el zombi encadenado para estudiarlo, Frank, el padre que sobreprotege a Hannah, su hija, Selena, la heroína dura y sufridora de raza negra… y no sólo homenajes a Romero, la historia comienza a lo Peter Jackson con el mordisco de un mono rarísimo, y se desarrolla con un ritmo 100% Dario Argento. La película en sí, destaca por los cuidadísimos pequeños detalles que siempre se escapan, como la falta de electricidad, y los recursos para conseguir agua, comida… ¡y diversión masculina!, la realista imagen de un Londres hueco, y la novedad de unos zombis más violentos, rápidos y mortales que nunca. ¿La lástima de todo el asunto? De los 10 finales que rodaron, eligieron el más tonto.
Por Mawee
viernes, 30 de mayo de 2008
SUGAR HILL ZOMBIE
Marki Bey, Don Pedro Colley, Robert Quarry, dirigida por Paul Maslansky afro-USA 1974.
Entretenida blacksplotation, sobre zombis, con fantásticos protagonistas chulangas, ligones y con peinados imposibles que luchan contra blancos malos malísimos a ritmo funky. La película toma el título del nombre de Diana ‘Sugar’ Hill, una cantante de cabaret de un pueblo cercano a la marina (o submarina) ciudad de Nueva Orleans, a quien unos matones le matan a Morgan, su novio, el dueño del local, por un asunto inmoviliario. Ella se vengará de su muerte con la ayuda de su abuela, una bruja makumba que le enseñará a invocar al Barón de Samedi y otros zombis, necesarios para llevar a cabo su venganza. Hecha con presupuesto 0, los zombis resultan curiosamente creíbles, pese a estar maquillados con barro y obtener el efecto de mirada vidriosa con cucharillas de café sobre los párpados, quizá es por la estética puesta en escena de las venganzas, versiones makumbas de las maravillosas venganzas del doctor Phibes (otro muerto viviente al que deberíamos dedicar un monográfico), que incluyen calderos humeantes, muñecos vudú, doma de serpientes, surgimientos de las profundidades subterráneas y buena música tribal africana que rompe con la ñoña banda sonora funky típica de estas producciones. ¿Lo mejor? La indumentaria discotequera de la chica, peluca afro incluida, a la hora de hacer los ritos vudús.
Por MAWEE
¿PARA CUANDO UNA PELÍCULA DISNEY DE ZOMBIS?
En el estúpido mundo del cine comercial, la única manera de que una película tenga éxito es que sea políticamente correcta, y por tanto, las películas de zombis quedan fuera de este selecto círculo de productores de Hollywood, a no ser que presenten una “desnatada” versión revisada con lupa destinada a promocionar video-juegos. Pero vamos, ¿alguno de estos super-jefazos le ha echado un vistazo a una película de Romero? ¿Se puede saber que tiene de políticamente incorrecto un grupo de humanos que intentan sobrevivir ante una situación límite? ¿Quien marca estas jodidas reglas sobre lo políticamente correcto y lo que no lo es?
La respuesta es la APA (Asociación de Padres Americanos), un organismo de cabezas de familia republicanos, ultra-cristianos, anti-abortistas y amantes de los rifles. Este grupo siempre vela por que sus hijos, ni los hijos de nadie puedan ver nada obsceno sobre una pantalla, Fueron los que pidieron a Spielberg que retirase del mercado Indiana Jones en el Templo maldito por sanguinaria (a lo mejor lo hizo), consiguieron que en la facultad de historia Berkley no se exhibiese la película Novecento de Bertolucci como ejemplo de la vida rural en la Italia de principios de siglo XX porque se ve como desollan a un cerdo, fueron responsables de que en Kill Bill vol.2 se eliminase una maravillosa sangrienta escena de Bill contra los alumnos de del maestro Wan Pao, censuraron el comic Rawhyde Kid por responsabilizarlo de provocar homosexualidad en los niños y tienen condenado a muerte a Marilyn Manson.
Lo curioso de este poderoso grupo de descerebrados (no confundir con zombis) es que cada año se quejan de lo “violentas” que se van volviendo progresivamente las películas Disney. Bueno... Si algún día un personaje Disney se corta afeitándose y le sale una gotita de sangre, a esta gente les dará un patatús, no obstante sí que es cierto, poco a poco Disney no es que se haya vuelto violenta, sino que está perdiendo el miedo a irse volviendo natural, así que quizá, a este ritmo, dentro de 200 años tendremos películas Disney sobre zombis. Que al fin y al cabo, ¿por que no?
¿Que hace falta en una película Disney? ¿Un relato sobre la amistad? ¿Acaso los supervivientes de un ataque zombi no ponen a prueba su amistad? Aprenden a que permanecer unidos, y compartir sus facultades es la mejor manera de sobrevivir, y en cuanto a los propios zombis, aprenden a dejar a un lado su pasado, para unirse amistosamente en la causa de comer carne humana, o vengarse del trato vejatorio que les dan esos estúpidos seres vivos.
¿La auténtica belleza reside en el interior? ¡Por su puesto! Un zombi puede serlo todo menos guapo, y sin embargo en algunos casos, como con Bub the Zombi, llegamos a tomarles cariño, y simpatizar con ellos. Los humanos los acosan por feos, los maltratan, los llaman “Podridos” y cosas peores, y todo porque no se han molestado en comprenderlos, mientras que los zombis no reparan en la belleza de los individuos, y valoran a los humanos no por su aspecto, sino por su cerebro.¿Acaso podemos desear unas lecciones éticas mejores para nuestros hijos? ¿Que pretenden los capullos de la APA? Los redactores de esta revista nos hemos destetado con Freddy Krugger y Jason Boorgies, y estamos la mar de guapos. En mi opinión, lo que les asusta a esos nazis no es la sangre y sexo (este segundo no está explícitamente presente en las películas de Romero) sino la dura crítica a la sociedad que estas películas hacen, usando el splatter como elemento de énfasis. Directores como Romero , Danny Boyle o Dario Argenti, inteligentemente, nos explican el valor de la amistad y de la auténtica belleza de un modo que hasta un adulto comprendería, y también nos critica otros aspectos de la civilización occidental como la sociedad de consumo, el nihilismo, el militarismo, la liga nacional del rifle, el racismo, el fanatismo religioso, los abusos de poder, las minusvalías físicas y mentales, los desequilibrios sociales, el aborto, la extrema derecha, la calidad de los servicios de emergencias y la falta de ética en la experimentación médica, entre otros. En otras palabras, critican todos los temas que defiende la misma APA, pues bien, recomendaría a esos señores, que en vez de criticar esas películas por “depravadas”, las critiquen por lo que son: ANTIFASCISTAS, y de paso explicad que son una ofensa contra vuestras creencias e intenciones de fabricar un maravilloso mundo para vuestros hijos... pero no para los hijos del los demás, evidentemente.
La respuesta es la APA (Asociación de Padres Americanos), un organismo de cabezas de familia republicanos, ultra-cristianos, anti-abortistas y amantes de los rifles. Este grupo siempre vela por que sus hijos, ni los hijos de nadie puedan ver nada obsceno sobre una pantalla, Fueron los que pidieron a Spielberg que retirase del mercado Indiana Jones en el Templo maldito por sanguinaria (a lo mejor lo hizo), consiguieron que en la facultad de historia Berkley no se exhibiese la película Novecento de Bertolucci como ejemplo de la vida rural en la Italia de principios de siglo XX porque se ve como desollan a un cerdo, fueron responsables de que en Kill Bill vol.2 se eliminase una maravillosa sangrienta escena de Bill contra los alumnos de del maestro Wan Pao, censuraron el comic Rawhyde Kid por responsabilizarlo de provocar homosexualidad en los niños y tienen condenado a muerte a Marilyn Manson.
Lo curioso de este poderoso grupo de descerebrados (no confundir con zombis) es que cada año se quejan de lo “violentas” que se van volviendo progresivamente las películas Disney. Bueno... Si algún día un personaje Disney se corta afeitándose y le sale una gotita de sangre, a esta gente les dará un patatús, no obstante sí que es cierto, poco a poco Disney no es que se haya vuelto violenta, sino que está perdiendo el miedo a irse volviendo natural, así que quizá, a este ritmo, dentro de 200 años tendremos películas Disney sobre zombis. Que al fin y al cabo, ¿por que no?
¿Que hace falta en una película Disney? ¿Un relato sobre la amistad? ¿Acaso los supervivientes de un ataque zombi no ponen a prueba su amistad? Aprenden a que permanecer unidos, y compartir sus facultades es la mejor manera de sobrevivir, y en cuanto a los propios zombis, aprenden a dejar a un lado su pasado, para unirse amistosamente en la causa de comer carne humana, o vengarse del trato vejatorio que les dan esos estúpidos seres vivos.
¿La auténtica belleza reside en el interior? ¡Por su puesto! Un zombi puede serlo todo menos guapo, y sin embargo en algunos casos, como con Bub the Zombi, llegamos a tomarles cariño, y simpatizar con ellos. Los humanos los acosan por feos, los maltratan, los llaman “Podridos” y cosas peores, y todo porque no se han molestado en comprenderlos, mientras que los zombis no reparan en la belleza de los individuos, y valoran a los humanos no por su aspecto, sino por su cerebro.¿Acaso podemos desear unas lecciones éticas mejores para nuestros hijos? ¿Que pretenden los capullos de la APA? Los redactores de esta revista nos hemos destetado con Freddy Krugger y Jason Boorgies, y estamos la mar de guapos. En mi opinión, lo que les asusta a esos nazis no es la sangre y sexo (este segundo no está explícitamente presente en las películas de Romero) sino la dura crítica a la sociedad que estas películas hacen, usando el splatter como elemento de énfasis. Directores como Romero , Danny Boyle o Dario Argenti, inteligentemente, nos explican el valor de la amistad y de la auténtica belleza de un modo que hasta un adulto comprendería, y también nos critica otros aspectos de la civilización occidental como la sociedad de consumo, el nihilismo, el militarismo, la liga nacional del rifle, el racismo, el fanatismo religioso, los abusos de poder, las minusvalías físicas y mentales, los desequilibrios sociales, el aborto, la extrema derecha, la calidad de los servicios de emergencias y la falta de ética en la experimentación médica, entre otros. En otras palabras, critican todos los temas que defiende la misma APA, pues bien, recomendaría a esos señores, que en vez de criticar esas películas por “depravadas”, las critiquen por lo que son: ANTIFASCISTAS, y de paso explicad que son una ofensa contra vuestras creencias e intenciones de fabricar un maravilloso mundo para vuestros hijos... pero no para los hijos del los demás, evidentemente.
por MAWEE
RE-ANIMATOR
Prod. Brian Yuzna, Basado en un relato de H.P. Lovecraft, Bruce Abbot, Barbara Crampton, David Gale, Dirigida por Stuart Gordon, 1985, USA.
Brian Yuzna nos presenta una nueva versión del mito de Frankenstein, aderezado con zombis. La historia comienza en la Universidad de Zurich, donde el doctor Best es expulsado tras crear un zombi. Más tarde, Best entra en el centro de investigaciones neuronales Miscathonic, en Arkham, Massachusets, comparte piso con el doctor Kane, un idealista, que al igual que el doctor Frankestein, pretende hacer todo lo posible por evitar la muerte. El doctor con más reputación en el centro, es un tal doctor Hill, inventor de un revolucionario sistema de trepanaciones, y con quien Best no tardará en enfrentarse, pues considera a éste un fraude, y de teorías desfasadas, pues no contempla que sea posible reanimar una persona que lleva más de 12 minutos sin actividad cerebral. El caso es que Best, ha inventado un suero especial (color verde-fosforito) con el que es capaz de resucitar a los muertos, eso si, en forma de zombi! Best es demasiado egocéntrico como para dejarse intimidar, y se ingeniará todo lo posible por llevar a cabo sus experimentos, aunque no tiene en cuenta que, con otros motivos, Hill también se interesará muchísimo por las propiedades del suero reanimador.
La historia viene a ser una fábula sobre las pulsiones humanas, lo que nos incita a seguir adelante y la forma que tienen éstas de sobrevivir a la propia muerte, El principio, en el que Best convierte en zombi a su maestro, nos muestra simbólicamente la forma de inmortalidad que experimenta un maestro tras pasar sus secretos a su discípulo, y como éste se vuelve distorsionado y monstruoso, tras haber sida profanada su memoria por la poca ética del discípulo. Best está obsesionado por ser el mejor (lo indica su nombre), es lo que le hace correr todo tipo de riesgos y violaciones de normas, quiere crear algo tan absoluto como la vida eterna, y ser eternamente famoso por ello. Hill, pese a su aparente formalidad, pretende convertirse en el director del hospital, en cuanto tiene la oportunidad, no duda un instante en lobotomizar al director Huxley y convertirlo en su esclavo-zombi, ni en robarle el suero a Best, en cuanto es convertido en zombi, su megalomanía aumenta, pues la mortalidad marca el límite de éxito que alguien puede tener en vida, y en el caso de un muerto viviente, este límite no existiría, así que decide crear a un ejercito de zombis para conquistar el mundo. En el caso de Kane, es un idealista, enamorado de la hija del director Huxley, y decide ayudar al doctor Best con el fin de ser mejor aceptado por el padre de ella, no deja de ver monstruosos los actos que comete el doctor Best… Hasta el final, pues la moral de todo el mundo tiene un precio. Con todo y con esto, los reanimados, acostumbran a ser violentos, resultado de una rebelión natural contra quien altera el ciclo natural de la vida.
La película muestra una puesta en escena de terror clásico, pero con cierto toque popie que nos hace recordar el estilo de la Hamer, al fin y al cabo, la Hamer ya había interpretado relatos de Loftcraft en muchas ocasiones, tampoco hay que olvidar las aportaciones Hitchconianas, como los títulos iniciales o la banda sonora, versión discotequera de la B.S.O. de Psicosis.
Total… una peli con mucha sangre y muchos monstruos, obtuvo el primer premio de cinema fantastic de sitges, y el del mercado del video de Cannes, fue seguida de dos secuelas: La Novia de Reanimator, donde Best crea todo un ejército de zombis montando trozos de cadáveres, y Beyond Reanimator, vomitiva cinta que probaba ser el último cartucho para salvar de la bancarrota a la Fantastic Factory, con la aparición de Santiago segura (ay dios!)
por MAWEE
NIGHT OF THE LIVING DEAD
¿Que podemos decir sobre esta maravilla?
Una pareja de hermanos viaja para hacer una visita a la tumba de su abuela, pero en el cementerio se encuentran con una sorpresa, ¡los muertos han hechado a andar! La chica corre a refugiarse en una casa abandonada cercana, donde se encuentra con Ben, otro viajero, afro-americano, que tambien ha optado por refugiarse en esa solitaria casa junto a una joven pareja y a un padre desesperado con su hija infectada por un mordisco zombi. Encerrados en una trampa mortal, rodeados por hordas insaciables de zombis caníbales, deberan no sólo sobrevivir ante el extraño peligro con el cual se han encontrado sin comerlo ni beberlo, sinó que deberan organizarse en plena crisis de histeria, salteada con sangre, tripas, carne y huesos
Quizá es la única película de Romero considerada “buena” desde la optica del cine “normal”, lo cual tiene unas connotaciones apoteósicas desde la optica del cine “friki”. Realizada casi con presupuesto 0 y recaudadora de 40 millones de dólares, merchandising y post-venta no incluido, volvió rico y famoso a George A. Romero, quien tuvo que ingeniarselas para rodar lo que queria sin que le escociera en exceso el bolsillo. El blanco y negro abarató el precio, y le dió una potente estética gótica que no conservó la versión de XXX de 1990, el sirope de chocolate utilizado siempre será una sangre más real que el ketchup technicolor que habría tenido de haber sido una producción cara de la época, la casucha ruinosa en que fue rodada amplificó la sensación de inseguridad y claustrofobia, más tarde imitada en Evil Death, y no olvidemos que de haber sido producida por un estudio comercial, Romero no habria podido llevar a cabo su inteligente doble sátira racial.
La película resulta tener el mismo argumento que Fort Apache, sólo que en vez de matar Indios, matan zombis, y en vez del glorioso séptimo de caballería aparece la NRA, tarde, y dándole un trato no muy cortés al héroe de la historia, que resulta ser uno de los primeros héroes afro-americanos del cine. En una época en la que los derechos humanos se ponían en entre-dicho en los USA, las películas de machotes cowboys blancos que masacraban indios y terminaban siempre en un perfecto Happy End con boda cristiana incluida, comenzaban a apestar, y Romero enseñó con esta curiosísima producción de série Z, el género que las sustituiría.
La película curiosamente resulta más sangrienta en el recuerdo que en la realidad, lo cual se debe más a la ausencia de efectos especiales caros que a la propia voluntad del director. En las siguientes secuelas esta ausencia cambió drasticamente, sobretodo grácias a la intervención del depravado y sanguinariamente cachondo director de efectos de maquillaje Tom Savini, quien tambien intervino en el re-make de 1990.
La película instantáneamente se convirtió en un film de culto, y en el esencial referente para todas las posteriores peliculas tanto del género zombi, como del género de terror en general. Seguida por toda una legión de secuelas, re-makes, blacksplotations, explotation movies, parodias, homenajes y plagios descarados, sólo Garci se atrevería a negar la grandeza de esta
cinta.
por MAWEE
Una pareja de hermanos viaja para hacer una visita a la tumba de su abuela, pero en el cementerio se encuentran con una sorpresa, ¡los muertos han hechado a andar! La chica corre a refugiarse en una casa abandonada cercana, donde se encuentra con Ben, otro viajero, afro-americano, que tambien ha optado por refugiarse en esa solitaria casa junto a una joven pareja y a un padre desesperado con su hija infectada por un mordisco zombi. Encerrados en una trampa mortal, rodeados por hordas insaciables de zombis caníbales, deberan no sólo sobrevivir ante el extraño peligro con el cual se han encontrado sin comerlo ni beberlo, sinó que deberan organizarse en plena crisis de histeria, salteada con sangre, tripas, carne y huesos
Quizá es la única película de Romero considerada “buena” desde la optica del cine “normal”, lo cual tiene unas connotaciones apoteósicas desde la optica del cine “friki”. Realizada casi con presupuesto 0 y recaudadora de 40 millones de dólares, merchandising y post-venta no incluido, volvió rico y famoso a George A. Romero, quien tuvo que ingeniarselas para rodar lo que queria sin que le escociera en exceso el bolsillo. El blanco y negro abarató el precio, y le dió una potente estética gótica que no conservó la versión de XXX de 1990, el sirope de chocolate utilizado siempre será una sangre más real que el ketchup technicolor que habría tenido de haber sido una producción cara de la época, la casucha ruinosa en que fue rodada amplificó la sensación de inseguridad y claustrofobia, más tarde imitada en Evil Death, y no olvidemos que de haber sido producida por un estudio comercial, Romero no habria podido llevar a cabo su inteligente doble sátira racial.
La película resulta tener el mismo argumento que Fort Apache, sólo que en vez de matar Indios, matan zombis, y en vez del glorioso séptimo de caballería aparece la NRA, tarde, y dándole un trato no muy cortés al héroe de la historia, que resulta ser uno de los primeros héroes afro-americanos del cine. En una época en la que los derechos humanos se ponían en entre-dicho en los USA, las películas de machotes cowboys blancos que masacraban indios y terminaban siempre en un perfecto Happy End con boda cristiana incluida, comenzaban a apestar, y Romero enseñó con esta curiosísima producción de série Z, el género que las sustituiría.
La película curiosamente resulta más sangrienta en el recuerdo que en la realidad, lo cual se debe más a la ausencia de efectos especiales caros que a la propia voluntad del director. En las siguientes secuelas esta ausencia cambió drasticamente, sobretodo grácias a la intervención del depravado y sanguinariamente cachondo director de efectos de maquillaje Tom Savini, quien tambien intervino en el re-make de 1990.
La película instantáneamente se convirtió en un film de culto, y en el esencial referente para todas las posteriores peliculas tanto del género zombi, como del género de terror en general. Seguida por toda una legión de secuelas, re-makes, blacksplotations, explotation movies, parodias, homenajes y plagios descarados, sólo Garci se atrevería a negar la grandeza de esta
cinta.
por MAWEE
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